lunes, 21 de noviembre de 2011

El consumo de fármacos sin control desarrolla una peligrosa adicción, dependencia y tolerancia que ocasiona efectos secundarios graves en la salud

      Si bien el uso de sustancias con fines terapéuticos es uno de los grandes avances y logros en la medicina que ha logrado erradicar, controlar o prevenir muchas enfermedades, físicas o mentales y/o controlar sus síntomas, como el dolor, el insomnio o la ansiedad, el abuso en el consumo de algunos de ellos, se considera como una adicción que se define como farmacodependencia y representa un problema de salud pública, tanto por los daños sociales que provoca como por su origen.

      Un fármaco es una sustancia que introducida en el organismo, puede modificar una o más de sus funciones y que al interactuar con él, altera algunas de sus funciones normales.

      El consumo de fármacos debe ser totalmente controlado y recomendado por un médico especialista, ya que todos los medicamentos, a corto o largo plazo tienen efectos secundarios que pueden ocasionar nuevos daños a la salud de quienes los consumen.

      La acción de los fármacos una vez que han ingresado en el torrente sanguíneo, pueden actuar de diferentes maneras:

     Por sustitución, cuando suplen alguna sustancia que falta en el organismo, como el caso de la insulina para los diabéticos o de la hormona tiroidea en enfermos de hiporitoidismo.

      En el metabolismo celular, ya que en todas las membranas celulares existen diferentes receptores que tienen diferentes responsabilidades en el funcionamiento de una célula.

    "Por ejemplo: los antidepresivos son inhibidores de la recaptación de serotonina e impiden que la vuelva a captar.

     Contra un organismo invasor, como es el caso de los antibióticos, antivirales o antifúngicos que destruyen y bloquean la acción de los microorganismos patógenos.

     Como aporte, como en el cado de que sustancias nutritivas como las vitaminas, el hierro, las proteínas estén disminuidas por déficits nutricionales."

     "El consumo de algunos medicamentos ocasionan adicción, por las sustancias que contienen o por la necesidad de las personas de contar con “algo” que les permita sentirse “mejor”, sin importar las consecuencias.

     Aunque la mayoría de los medicamentos se utilizan de forma aislada y otros no están considerados como adictivos, entre los más consumidos que pueden ocasionar dependencia física o sicológica, están:

- Los analgésicos para controlar el dolor.
- Vomitivos y diarréicos, utilizados por personas con trastornos alimenticios.
- Antipresivos o tranquilizantes.
- Medicamentos para evitar el insomnio.
- Sueño
- Relajantes musculares.
- Para control de peso.

    Así entre los fármacos que causan adicción están los barbitúricos y las anfetaminas."

No hay comentarios:

Publicar un comentario